Seguridad ciudadana. Balance de investigación 2016-2021 y agenda de investigación 2021-2026.
Resumen
Solo recientemente, la seguridad ciudadana ha sido desplazada por la corrupción como principal problema percibido, siendo que dicha percepción se alimenta de miedos objetivos y subjetivos, hechos delictivos, violencia y otros fenómenos sociales. En este sentido, producir un balance y agenda en seguridad ciudadana requiere un mínimo de contexto sobre la violencia y la criminalidad en el país.
Son tres los indicadores más empleados como termómetro de la seguridad ciudadana. Primero, la victimización, que equivale al porcentaje de personas víctimas de algún hecho delictivo. Segundo, la percepción de inseguridad o el miedo al crimen son elevados y poco flexibles, incluso cuando esta pregunta se circunscribe al miedo a caminar de noche en el barrio. Tercero, en un plano distinto, la tasa de homicidios (por cada cien mil habitantes) es uno de los indicadores más empleados para acercarse a medir la violencia, pues reduce las complejidades de las comparaciones a nivel internacional. Solo se han publicado datos entre el 2011 y el 2017, los que muestran una preocupante tendencia al alza.
Este estudio se desarrolló como resultado del XXIII Concurso Anual de investigación CIES 2021-I y forma parte del compendio del Balance de Investigación 2016-2021 y Agenda de Investigación 2021-2026. Es auspiciado por la Fundación Manuel J. Bustamante de la Fuente, el Centro Internacional de Investigaciones para el Desarrollo (IDRC, por sus siglas en inglés) y el Consorcio de Investigación Económica y Social (CIES).
Esta investigación también se encuentra dentro de:
- - Repositorio REPEC
- - Academia.edu
- - ResearchGate
Abstract
La producción de investigaciones sobre seguridad ciudadana en el Perú es un reflejo de los problemas visibles y menos visibles del crimen y la violencia, así como de su dinámica y heterogeneidad, algo que como preocupación general sigue siendo percibido como un problema tangible para los ciudadanos.