Niños guías de Narihualá: una exploración de las causas y consecuencias económicas y culturales

El Perú ha ratificado los convenios emitidos por la OIT que ordenan esfuerzos a erradicar el trabajo infantil. Desde el año 2000, un grupo de niños y niñas del centro poblado de Narihualá, de entre 5 y 14 años, realiza actividades de orientación turística al interior del sitio arqueológico y museo de sitio de Narihualá. Después de recibir una capacitación sobre la historia de los tallanes y de Narihualá, los niños se desempeñan como orientadores turísticos de forma voluntaria, con el consentimiento de sus padres, fuera de sus horarios de clase, y reciben a cambio una propina. Esta iniciativa surgió frente a la ausencia de guías turísticos autorizados y la mendicidad infantil en la zona.

 

Hacia fines del año 2016, la Municipalidad Distrital de Catacaos reconoció tácitamente la participación de estos niños y niñas como orientadores, en una ceremonia donde resaltó su labor como promotores de la riqueza cultural del distrito. Además, rindió homenaje al encargado del museo, quien es el principal responsable de la formación de los niños como orientadores. Esta suerte de validación institucional podría ser un reflejo de la normalidad con la que se vive el trabajo infantil en la zona, el cual parece estar motivado en razones económicas, culturales e históricas. En diciembre del 2017, sin previo aviso, la Dirección Desconcertada de Cultura de Piura clausuró el programa. La experiencia con una continuidad de más de 15 años no fue sistematizada. 

Dado el contexto, es necesario, por lo tanto, explorar las causas y consecuencias de esta actividad a fin de identificar apreciaciones y conductas que permitan lidiar con situaciones similares en otros atractivos turísticos.

 

Si bien esta actividad tiene un carácter formativo en la personalidad de los niños que favorecería su futura inserción laboral, podría tener también consecuencias negativas en su escolaridad. Las recomendaciones de políticas deben considerar la interacción de los posibles beneficios y costos de esta actividad. En este caso específico de trabajo infantil, esto no ha sido así. Los actores institucionales que promueven esta actividad se basan en el carácter formativo de la misma y en la no interferencia con las horas de clase para sustentar su accionar permitiendo la participación laboral de los niños. Sin embargo, el mecanismo de impacto en la escolaridad podría ser el aprendizaje y no la asistencia escolar. Un análisis que ignore alguno de los mecanismos que podría afectar la integridad de los niños lleva a recomendaciones de políticas erradas. En ese sentido, hace falta explorar cómo la interacción de posibles costos y beneficios, considerando todos los canales, podría afectar el desarrollo de los niños.

 

Los actores institucionales que promueven esta actividad no están tomando en cuenta todos los mecanismos a través de los cuales el trabajo infantil podría afectar el desarrollo de los niños.

 

El estudio permitirá a los hacedores de políticas públicas diseñar mejores alternativas de solución a los problemas asociados con el trabajo infantil y la falta de igualdad de género.

 

La Estrategia Nacional para la Prevención y Erradicación del Trabajo Infantil 2012-2021, el Comité Directivo Nacional para la Prevención y Erradicación del Trabajo Infantil (CPETI), y a nivel regional el Comité Directivo Regional de Prevención y Erradicación del Trabajo Infantil – CDRPETI, así como el Plan Regional de Igualdad de Género 2016-2021, son avances en el diseño de lineamientos a nivel nacional y regional a los cuales este estudio busca contribuir.

 

Por otro lado, los resultados de carácter exploratorio del estudio serán una primera aproximación al carácter multicausal del trabajo infantil y a la complejidad de los mecanismos involucrados en la escolaridad. Buscamos sensibilizar a las autoridades institucionales involucradas y a los padres de familia acerca de los posibles costos y beneficios de la participación laboral de los niños. Asimismo, los resultados servirán como insumo para futuros estudios que busquen encontrar el impacto causal de esta actividad sobre diversos indicadores de bienestar de los niños participantes.

El estudio se desarrollará en dos etapas. La primera consiste en la sistematización del programa. La idea es conocer los orígenes y respaldo institucionales de la participación laboral de los niños como orientadores turísticos. Se intentará recuperar y analizar los procesos de diseño, reclutamiento e implementación de esta práctica. Usaremos dos técnicas de recopilación de información: (i) revisión de información secundaria y (ii) entrevistas a profundidad con los agentes institucionales involucrados (representantes del Ministerio de Cultura, Dirección Regional de Trabajo y Promoción del Empleo de Piura, municipalidad Delegada de Narihualá, municipalidad de Catacaos, autoridades de los colegios de Narihualá y Catacaos, y representantes de la sociedad civil).

 

La segunda etapa es el recojo de información directa de los agentes involucrados. Se realizarán entrevistas en profundidad a los niños y padres de familia para explorar la importancia de las motivaciones culturales y económicas en la participación laboral de los niños, así como explorar las consecuencias en términos de escolaridad y el desarrollo de su identidad cultural.

 

Siguiendo las líneas del enfoque cualitativo, se seleccionará participantes dentro del universo de niños y niñas que se desempeñaron como orientadores turísticos. Los participantes serán informados acerca de los objetivos de las entrevistas y su participación será voluntaria. Con respecto a los niños y niñas, se utilizará un protocolo de Consentimiento informado para que los padres y/o apoderados autoricen la investigación sobre los niños, asegurando la confidencialidad, el uso apropiado de los datos y la retroalimentación de los resultados.

Al informe parcial, se ha concluido con la primera etapa. Los resultados se pueden clasificar en tres dimensiones: (i) motivaciones que dieron origen al programa, (ii) aceptación y percepción institucional de las actividades de los niños, y (iii) potenciales consecuencias de estas actividades.

 

La participación de los niños como orientadores turísticos surge como iniciativa para enfrentar la mendicidad de la zona y la falta de guías oficiales. Así, la necesidad de involucrar a los niños en el desarrollo histórico y cultural de la localidad se manifiesta más bien como un medio para justificar el envío de menores de edad a realizar labores de orientación turística.

 

Con respecto a la aceptación y percepción institucional de las actividades de los niños, se encontró que, salvo la DDC-Piura, la participación de los niños es aceptada y valorada a nivel institucional. Es decir, la comunidad ve con agrado que los niños realicen actividades de orientación turística. Los representantes de las instituciones rescatan el fortalecimiento de la identidad cultural de los niños, así como la no interferencia con las clases como base para tener normalizada esta actividad.

 

Sin embargo, se encontró también desinformación institucional acerca de lo que es y no es el trabajo infantil. La ausencia de remuneración y la naturaleza voluntaria de la actividad se mencionaron como los factores que desligan esta actividad como trabajo infantil.

 

Otro hallazgo importante es el consenso institucional en la necesidad de involucrar a los niños en el desarrollo cultural de la zona. A nuestro entender, este argumento es el mecanismo que permitió promover el desarrollo de esta actividad por largo tiempo.

 

Finalmente, existe una percepción positiva acerca de las consecuencias de esta actividad. Los representantes de las instituciones mencionan que el servicio de guiado por parte de los niños no interfiere con su escolaridad ya que los niños no dejan de asistir a sus escuelas. Además, estas actividades favorecen el desempeño de los cursos de historia y potencian la identidad cultural de los niños participantes.

 

Estos resultados preliminares proveen al equipo de investigación información valiosa para diseñar los instrumentos que serán utilizados en la segunda etapa. De tal manera, tomamos los resultados presentados arriba como aproximaciones preliminares y no como definitivos. Por ejemplo, creemos que es posible que las instituciones y los niños participantes no estén considerando otros mecanismos (además de la asistencia escolar) que podrían afectar su aprendizaje. No descartamos tampoco que, dados los horarios aleatorios en que los niños se dedican a esta actividad, no se encuentre una relación negativa con su escolaridad.

La literatura sobre trabajo infantil se ha concentrado en analizar sus causas y consecuencias. La teoría económica tradicional sostiene que las restricciones monetarias son las que determinan que los padres envíen a sus hijos a trabajar.¹ Estudios con raíces históricas y sociológicas, por otro lado, hacen énfasis en las motivaciones culturales para explicar esta práctica.²

 

Según estos estudios, la participación laboral de los niños no debe verse aislada de las normas y tradiciones socioculturales de cada localidad, ya que éstas dan el marco al rol de los niños en la unidad productiva de la familia. Es así que en países desarrollados y en áreas urbanas, el trabajo infantil tiene poca popularidad. Sin embargo, en países en vías de desarrollo y en zonas rurales, el niño forma parte de la unidad productiva familiar desde temprana edad.  En consecuencia, en estas áreas el trabajo infantil es más aceptado.

 

Por el lado de las consecuencias, el análisis se ha concentrado en los posibles efectos sobre la escolaridad de los niños. Diversos estudios encuentran efectos negativos en la acumulación de escolaridad de los niños.³ Sin embargo, y especialmente para el caso peruano, la deserción escolar no parece ser el mecanismo relevante. Reducciones en el nivel de aprendizaje parecen ser el canal a través del cual la participación laboral de los niños tiene efectos negativos sobre la acumulación de escolaridad.⁴